estoy aquí, tras la puerta cerrada.
respiro cuidadosa
mente
para sostener un silencio que me permita percibir tu respiración
del otro lado. te he pescado.
eres el más hermoso de los peces que
por descuido ha saltado a mis manos. contemplo
tu muerte en mi regazo
y te encuentro bello
ahora
será imposible
devolverte al agua,
pero
no
quiero tenerte.
me quedo inerte ante tu dolor,
y te acompaño hasta
tu propia quietud
forzada y adquirida.
'nadie puede capturar la luna en un espejo', te digo como consuelo
y beso tu pico de carne,
te observo con mis ojos dentados,
la escena se filtra
por estos oídos
que son los únicos
que se entregan
risueñamente al sueño.