porque el tiempo es breve, pero me ama

viernes, 9 de agosto de 2013

confía en un hombre que tenga en su casa una tabla de picar. que además sepa modelar animalitos en plastilina. que intuya tu debilidad por las galletas. que se quede mirando la suspensión de un bicho que ninguno de ambos logra determinar. que se dé cuenta de lo que tú te das cuenta: el peso de las ramas, la presencia de los roedores, las goteras de las nubes, la importancia de la risa. confía en la sincronía de los sistemas excretores. en la empatía por tu macabro sentido del humor y tu necesidad por el encierro. confía en un hombre que sabe escoger correctamente las manzanas que luego morderá, sin temor a la gravedad o a la expulsión del paraíso. atraviesa el manicomio en el copilotaje y recupera la conciencia y la alegría.